martes, 28 de febrero de 2017

El tpv gratis que hizo mi tienda viable

Esta historia va sobre mi aventura como emprendedor y en concreto sobre el coste personal de cerrar una tienda por culpa de un mal tpv y triunfar con otra solo y únicamente gracias a otro tpv. El tpv que hizo que cerrara prefiero olvidarlo en el fondo de mis recuerdos. Este artículo hablará sobre el tpv gratis que me hizo gestionar mi tienda para en principio ser viable y terminar siendo todo un éxito.

Soy emprendedor desde aquel día me di cuenta que trabajar para otros era malgastar mi talento. Aquel día lo tuve muy claro: quería montar una pequeña tienda de ropa en mi barrio. Hice todo lo que se necesita para montar una tienda de moda: alquilé un bonito local céntrico, contacté proveedores, diseñé un estupendo escaparate y me compré un tpv baratito que vi en una web de segunda mano. Sin embargo al año cerré mi tienda.



Pasé los siguientes 3 meses analizando mentalmente el porqué había tenido que cerrar. ¿Porqué tiendas con peor mercancía seguían dando beneficios y la mía había quebrado? No lo hice con grandes esperanzas, pues no había razón para pensar que ahora, después de cerrar, iba a dar con la clave de algo que no había encontrado en medio de la vorágine. Lo curioso del caso es que me di cuenta de que mientras mi tienda se iba a la deriva basaba todas mis acciones en la intuición y en reacciones a determinadas situaciones. Una vez cerré pude cuantificar los resultados tranquilamente. Con números y no a golpes de intuición y llegué a varias conclusiones a las que me hubiera sido imposible llegar antes:
  • Compraba prendas a mis proveedores que pese a que no se vendían a mi me gustaban.
  • No hice ningún contacto con clientes que ya habían comprado anteriormente. Mis acciones de publicidad se centraban en captar nuevos clientes.
  • No tenía un historial de clientes y de sus compras.

Sencillamente me di cuenta de que todo giraba a cosas que debía haber hecho mi tpv por mi y no hizo. Mi tpv no sirvió de nada. Aquella debacle podía haberse evitado si hubiera tenido los datos delante de mis ojos, si mi tpv hubiera cumplido con su función. A partir de ahí me animé y planee montar una segunda tienda, y esta vez escogería el software tpv adecuado.

En la búsqueda del tpv perfecto

Analicé el mercado en la búsqueda de ese tpv que me ayudara, que me guiara a la hora de comprar a mis proveedores y a la hora de hacer volver a mi tienda a los clientes. Los requisitos que pedía a un tpv eran los siguiente:
  • Un tpv muy fácil de usar. Tras tantear un poco el terreno me di cuenta de que habían tpv bien diseñados con una interfaz minimalista, y los había complejos, caóticos y antiestéticos.
    Mi objetivo era encontrar algo simplemente fácil y agradable.
    Tampoco quería miles de herramientas que jamás iba a usar. Sólo quería herramientas que fueran imprescindibles.
  • Un tpv con un coste reducido. Me negaba a pagar una pasta por algo que no había probado en medio de duro día de trabajo. Las viejas empresas de software parecían que no se habían enterado de que el software moderno se cobra por servicio y no por licencia.
  • Pero sobre todo buscaba un tpv que me diera datos útiles sobre mis clientes. Que me dejase añadir clientes para después tener un historial de sus compras. Mi objetivo era poder enviar emails o mensajes de whatsapp a cada uno de mis clientes con productos que pudieran interesarles personalmente. Quería que volviesen a mi tienda.
Así pues me puse manos a la obra y comencé a probar todo programa de gestión que aparecía en google, foros o redes sociales. Probé más de 20 programas en total y gracias a esta experiencia pude tomar la decisión correcta. En mi búsqueda me topé con programas tpv de todo tipo: caros, baratos, en la nube o de escritorio. Probé y probé, y las conclusiones que pude sacar en claro son estas:
  • Los programas tpv de escritorio se han quedado atrás. La diferencia con los tpv online es muy grande. Supongo que es porque las empresas que venden tpv de escritorio tendrían que hacer la tpv desde 0 para poder competir con las nuevas tpv que funcionan en la nube.
    Supongo que también es porque las empresas que hacen aplicaciones para la nube tienen los diseñadores más jóvenes y con ideas frescas.
  • La sencillez es un plus. He visto algunas tpv que hacía falta un mes de formación para manejarla medianame bien. Y también he visto otras tpv que no me hacían falta ni 20 minutos para tener un control total sobre el programa.
  • Un tpv web mejor que un tpv aplicación. Después de mi estudio he llegado a una conclusión clara: las tpv que son app y se instalan en un sistema operativo determinado son mucho más limitadas que aquellas que se manejan desde un navegador web. No hay color.
  • Hay tpv gratis mejores que de pago. Encontré a la vieja industria de desarrollo de tpv con precios desorbitados dando peor servicio y vendiendo un software de peor calidad que aquellas empresas nuevas que habían desarrollado tpv con las prestaciones que yo necesitaba y lo que es mejor, eran gratis.
Al final me decidí por el tpv de Catinfog. El tpv de catinfog es gratis, es sencillo, funciona en la nube, y además me dió la posibilidad de crear una tienda online sincronizada con mi tpv.
No aprendí a usarlo porque estaba todo muy claro. En mi opinión, Catinfog se ha inspirado para la creación de su tpv en las tpv que están cambiando el sector en Estados unidos, como vendhq o shopify. También me gustó su forma de manejar cajas registradoras y las estadísticas por cliente, vendedor y caja registradora.

Así pues me armé de valor y volví a montar una tienda de ropa por segunda vez, con mis últimos ahorros y con este tpv gratis. Al principio todo fue bien. Pero al contrario de lo que me ocurrió la primera vez, ahora cada mes era mejor. El tpv me ayudó muchísimo. Ya sabía qué debía y que no debía comprar. Sabía que debía recomendar a cada cliente. envíaba newsletters regularmente a mis clientes, gestionaba las devoluciones con tickets que tenían crédito para futuras compras, etc.

También me ayudó a crecer la tienda online. Parece mentira, pero exponer tus productos en internet, aunque no hagas nada de posicionamiento, genera venta. Ahí es cuando me de cuenta de que mis clientes habituales entraban en mi tienda online y venían a mi tienda física en vez de ir a la de la competencia. Incluso gané clientes que antes no me conocían de barrios o de pueblos alejados de mi tienda física ¿Cómo no me di cuenta antes?
Finalmente mi tienda física ha remontado. En la actualidad es estable económicamente y todo gracias a la feliz idea de usar un tpv útil, pero sobre todo un tpv gratis.

No hay comentarios:

Publicar un comentario